martes, 16 de agosto de 2011

12 días atrás.


Ya, ya lo sé. Han pasado casi dos semanas en las que no he escrito ni una palabra. Pero ha sido por una buena razón, y es que he estado disfrutando del aire libre y lo que menos he hecho es sentarme frente al ordenador. Definitivamente, éste no será el mejor de mis posts, pero sólo lo dejo por aquí para dar un pequeño, pequeño recuento de mis días...
Les diré que han sido muy interesantes y bonitos. Pues resulta que he librado varios días seguidos durante las pasadas dos semanas y me parece que por fin he probado un poco de eso que llaman "vacaciones"... ¿Y les digo algo? No está tan mal, ¡eh!

He patinado, ido a la playa, paseado, hecho fotos... Me he relajado. La verdad... Increíble sensación. 

Pero algo muy importante ha sucedido hoy. Tengo un billete ida y vuelta para visitar a mi hermosa familia y amigos en Miami. Serán dos semanas perfectas, sin duda. ¡NO TENGO MUCHAS GANAS DE ESPERAR!

En fin, ya que tampoco tengo demasiada información que aportar para sus "ojitos lectores", me retiro de aquí, pero no sin desearles a todos una muy buena semana. 

xx

viernes, 5 de agosto de 2011

Un punto medio en Las Ramblas.

No es ningún secreto que Barcelona durante la estación de verano está más sobrepoblado que en los otros 10 meses del año sumados juntos. Es impresionante, gente de todas partes del mundo elige ésta ciudad como destino vacacional, bien sea por un fin de semana o un mes entero. Familias, parejas, grupos de estudiantes, viajeros solitarios, etcétera; La playa es la atracción principal del paquete veraniego. Por supuesto, la comodidad es un punto débil de todo ser humano, sea de donde sea. Con ésto me refiero a que a pesar de lo preciosas que son las costas a sólo media hora en tren, la pereza termina ganando el 80% de las batallas. Nada más fácil que bajar Las Ramblas y que en pocos minutos tus propias piernas te hayan llevado hasta la Barceloneta.

Tráfico de gente. Cientos de personitas caminando a un paso más que lento, y a su vez, observando los cielos como si fuese algo nuevo. Si sufres de los nervios, no es un lugar muy recomendable. Por ejemplo, cuando decido tomar esa ruta, he de meditar un poco y respirar contando hasta diez antes de comenzar.

Pero lo he conseguido, he conseguido hacer el viaje más ameno. Hace poco más de un mes (quizás, no soy buena con fechas) una amiga preciosa -de cabello violeta- me llevó de la manito (no literalmente) para aventurarnos a atravesar las grandes puertas de La Boquería. Directo a un puesto de zumos que parecía una paleta de colores. Personalmente, nunca he sido muy de beber zumos, excepto de naranja en cartones del súper mercado. Triste, ¿no? Éste lugar es el mejor descubrimiento de mi verano. Es que son exquisitos. ¡TODOS! ¿Y mi favorito cuál es? Papaya + coco

Y para colocar la cereza encima del helado, La Boquería está -relativamente- a la mitad del largo camino que te espera cuando das el primer paso -con el pie derecho- en el paseo más famoso de Barcelona. Lo que significa que, de cierta manera, se puede ver así: los zumos de La Boquería son a Las Ramblas lo que las cheerleaders son a un equipo muy malo de fútbol americano. ¿Se entiende?

P.d: ¡Espera, espera, aún hay más! El secreto de la casa: si vas cerca de la hora del cierre es posible que termines con dos zumitos en mano ¡por sólo un euro! (Regularmente el precio es de 1,50e c/u)

xx

jueves, 4 de agosto de 2011

¿Son 2 ó 20?

Hace dos días iba caminando sola por la tarde y me topé con un kiosko de periódico, pensé en asomar un ojo y quizás pillar una revista para el camino en metro que me esperaba posterior a la caminata. Sin embargo, fue una caja de cartón lo que captó mi curiosa mirada. Estaba llena de libros. Alguno de Oslo, otros de misterio, y luego ésta joyita. Alicia en el país de las maravillas, una re-edición para editoriales económicas. Tenía una pequeña etiqueta en la esquina superior izquierda que no me dejaba claro si el precio era 2 ó 20 euros. Con la voz baja le pregunto a la señora simpática encargada de atender a atontados como yo, y me dice: "¡UY, CHATA! ¿Cómo van a ser 20 euros? ¡DOS, DOS!" Mientras ella se reía yo trataba de acompañarla con una risa un poco de avergonzada.
No lo dudé ni por un segundo, le dí una moneda de 2 y continué mi camino. No hojeé sus páginas hasta que me senté en un café y metí mi cara -literalmente- entre aquellas hojas con olor a libro nuevo. Además, Alicia aún tenía una sorpresa más para mí. ¡ES ILUSTRADO!

xx

Faux-verano.

¿Será? ¿Ha llegado finalmente el verano? Agosto, ¿qué tienes preparado para el ambiente barcelonés? ¡Dímelo, dímelo ya!

Tema de conversación de todo habitante/visitante de ésta ciudad. El mes de julio no fue más que una extensión de la primavera. Llovió, hizo frío, y finalmente, un día antes de finalizar los 31 que marcan los calendarios... ¡Granizó! Sí, pequeñas esferas de hielo caían del cielo. No les estoy tomando el pelo.

Tormenta.
30 de julio - 25ºC de temperatura - granizando.

No es normal. En lo absoluto. Recuerdo que en el colegio me enseñaron que -y si no es así, que alguien me corrija- para que caiga granizo ha de hacer frío, ¿o no? No me entero de nada...

En fin, hoy, día 4 de Agosto, retomo lo que es mi blogspot. Y mientras escribo esta primera entrada, el dock de mi ordenador me "advierte" que para el martes de la semana que viene las temperaturas mínimas han de bajar a 19ºC... Ya te digo yo... ¡FAUX-VERANO!

xx